En nuestra boca, existen bacterias que pueden ocasionar daños en el periodonto o tejidos de soporte (encías, hueso alveolar, ligamento periodontal y cemento radicular) ocasionando enfermedades gingivales o periodontitis.
El tratamiento para la periodontitis consiste en realizar una limpieza profunda, curetaje o raspado radicular de los dientes, en conjunto con enjuagues bucales medicados.
La enfermedad periodontal o periodontitis es una condición inflamatoria crónica originada por bacterias que se encuentran en la superficie de las raíces de los dientes en forma de cálculo o sarro dental. Nuestro cuerpo, como mecanismo de defensa, nos protege de dichos ataques por medio de una reacción inflamatoria, sin embargo, los productos de desecho del metabolismo de estas bacterias ocasionan lesiones en los tejidos periodontales y los destruye. Esto se traduce en pérdida de hueso alrededor de los dientes, pérdida de encía y de los tejidos de soporte dentario, lo que conlleva a la movilidad dentaria y posterior pérdida de los mismos.La mejor manera de diagnosticar en casa si existe alguna afección de las encías es evaluando los siguientes aspectos:
- Color: el color de las encías debe ser rosado claro, permitiendo variaciones según la pigmentación de la piel de cada individuo. La tonalidad rosada es una señal de una correcta irrigación sanguínea.
- Aspecto: la superficie de las encías debe tener un punteado característico parecido al de una cáscara de naranja.
- Grosor: generalmente la encía es delgada, fina, uniforme, como una delicada capa protectora que cubre las raíces. Es importante que no existan inflamaciones o alteraciones de tamaño.
- Ausencia de sangrado: La encía no debe sangrar, ni de una forma espontánea ni bajo ningún estímulo normal, como, por ejemplo, lavarse los dientes o comer.
- Altura: normalmente, la encía debe cubrir las raíces de los dientes.
Una evaluación radiográfica es determinante para el correcto diagnóstico de periodontitis. Radiográficamente se puede observar pérdida de hueso entre cada diente con un patrón de destrucción horizontal o vertical. La radiografía periapical como herramienta de diagnóstico es la más indicada en estos casos.
El tratamiento para la periodontitis consiste en realizar una limpieza profunda, curetaje o raspado radicular de los dientes, en conjunto con enjuagues bucales medicados. Asimismo, el tratamiento de la enfermedad periodontal puede ayudar a mejorar o prevenir otras condiciones médicas crónico degenerativas, como lo son la diabetes, alteraciones cardiovasculares, respiratorias, complicaciones durante el embarazo, entre otras.
La periodontitis es una enfermedad totalmente tratable en donde la eliminación de los agentes causales permite una recuperación y cicatrización de los tejidos. La terapia periodontal de apoyo, incluye el cuidado periodontal profesional y personal. Sin embargo, la prevención oportuna de esta enfermedad es la mejor herramienta para evitar este tipo de alteraciones.
Dra. Andrea Suárez Sanquiz
Master en Ortodoncia y Ortopedia Maxilar